Este pasado sábado día 24 de marzo, jornada de reflexión electoral en Andalucía, tres valientes adoquineros fuimos a conquistar, por quinto año consecutivo, tierras rondeñas en esta prueba ya consolidada en el calendario de montaña andaluz. En principio íbamos a ir 4, pero Ramón fue baja de última hora por un inesperado resfriado, así que desde aquí le deseamos una pronta recuperación. A las 6´45 horas de la mañana salimos Pepe Valderas y quien suscribe dirección Sevilla, recogimos a Fernando y para Ronda echando leches que había que recoger el dorsal antes de las 9. Llegamos con tiempo suficiente, recogimos el dorsal, cambio rápido de ropa con las dudas siempre presentes de si llevamos ropa de abrigo o no, que si va a hacer calor etc. 
Al final Fernando y Yo optamos por llevar un cortavientos (la experiencia también cuenta) mientras que Pepe (debutante) optó por no llevarlo.
Salida a las 10 de la mañana, totalmente masificada entre participantes de la Marcha Larga (45´6 Kms) y la Marcha Corta (21,2 Kms), y así poco a poco, con el tiempo amenazando lluvia, partimos hacia la aventura.
Ritmo tranquilo los primeros kilómetros, siempre adelantando a corredores, pero con la inquietud de que el recorrido era nuevo y no sabíamos como serían las sorpresas que siempre nos tienen guardadas nuestros amigos del Patronato.Fuimos los tres juntos hasta el kilómetro 9 más o menos, en que Fernando tuvo que hacer una parada de emergencia (jejeje), Pepe siguió hacia adelante ya que no quería detenerse para no cortar el ritmo, mientras que Yo estuve dejándome de ir hasta que Fernando me alcanzó, allá por el km. 14.
A partir de aquí empezaba lo duro, con una serie de subidas y bajadas bastante técnicas y peligrosas (sobre todo una llena de piedras, que si mala era la subida peor era la bajada), y así, poco a poco, fuimos haciendo camino hasta el km. 39 en que ya empecé a sufrir de piernas.
Fernando se fue hacia adelante y yo seguí mi ritmo cansino, lento, suave, seguro, hasta que en el km. 42 me encuentro a Pepe andando porque está sufriendo calambres musculares (he de decir que me sorprendió su rendimiento, no por sus facultades físicas, que le sobran, sino porque era su primera prueba de trail, y esto siempre se paga) y me dice que ya no puede correr.
Estoy acompañándole un rato hasta que decido tirar porque el tiempo que llevaba era bueno, y hete aquí que el tío también se pone a correr y así llegamos a meta juntos.
Al final todo el mundo contento, sobre todo Pepe que debutaba en la prueba, por como se había desarrollado la misma y por como habíamos llegado (sin lesiones).
Según el GPS de Fernando hicimos casi 47 kms, en los que Fernando invirtió 5h38´y Pepe y Yo 5h,51´ cada uno, quedando los tres entre los 285 primeros corredores de la General, en que llegaron 671.
Como siempre digo, esperemos que el año que viene seamos más los que defendamos el pabellón adoquinero.
Un saludo para todos.
RAFAEL.
