martes, 10 de mayo de 2011

101 KMS DE RONDA; LA LEGIÓN CONTRA LAS DROGAS





¡¡¡ LO CONSEGUIMOS!!!, ¡¡ LO HEMOS LOGRADO!!




Efectivamente amigos y compañeros, este pasado fin de semana, 7 y 8 de Mayo de 2011 se ha celebrado la madre de todas las carreras, los 101 kilómetros de Ronda organizada por La Legión con el lema "La Legión contra las drogas".




Yo ya lo había intentado dos veces, la primera en el año 2008, en la que logré terminarla junto con el compañero Pedro Rincón, y otra vez en el año 2009 con el compañero Fernando, en el que tuvimos que abandonar en el kilómetro 58 por diversos problemas musculares y de hidratación.




Como quiera que en el año 2010 no se pudo celebrar la misma por problemas logísticos (el tercio estaba en Afganistán), estábamos deseando que llegara este año para poder sacarnos la espina (con el consiguiente disgusto de mis buenos amigos Cota y Pepa que celebraban la comunión de su hijo).


Esa vez nos personamos en la línea de salida Fernando, Ramón y el que redacta estas líneas, con mucha ilusión pero sabedores de que la empresa no sería fácil.




La verdad es que la cosa no empezo muy bien, pues habíamos quedado en salir a las 7´15 de la mañana para Ronda y por un olvido mío (me dejé el dorsal y el pasaporte en casa) tuvimos que volver a Gerena y ya todo fueron prisas para llega a tiempo de entregar las mochilas y pasar el control de entrada antes de las 10´15 de la mañana. Finalmente, a las 10´50, es decir 10 minutos antes de la salida, todo quedó solucionado y hasta nos dió tiempo de hacernos algunas fotos en el campo de fútbol de Ronda desde donde salía la prueba.

Por fin a las 11 en punto de la mañana del sábado día 07/05/11 dió comienzo la prueba con el cañonazo como señal.




Como ya teníamos experiencia de otros años y sabemos que en este tipo de carreras de ultrafondo lo fundamental es mantener un ritmo tranquilo pero constante (sobre todo porque hay pocas rectas y casi todo son subidas o bajadas), salimos relajados, sin intentar cansarnos en demasía y guardando fuerzas para lo que nos esperaba.

En esos primeros kilómetros nos encontramos a dos corredores que viven en Jardines de Gerena, creo recordar que sus nombres eran David y Juan, y con ellos empezamos a hacer camino hasta que cada uno cogió el ritmo que más le convenía.





Los kilómetros iban cayendo lenta pero inexorablemente, la primera hora 6, la segunda 9, la tercera otros 9, y así hasta que llegamos al circuito Ascari, donde empezamos a cruzarnos con los primeros de la general en un bucle del recorrido.

Las fuerzas todavía las manteníamos intactas (buen entrenamiento el que hemos hecho este año), cuando nos apetecía nos hacíamos unas fotos para el recuerdo, y así, poco a poco llegamos a la localidad de Arriate (Kilómetro 35 aproximadamente) donde hicimos la primera paradita para recuperar líquidos.




Como no podía ser de otra manera nuestro recuperador habitual es una cervecita fresquita (o dos) antes de encarar Puerto Salinas, que nos esperaba un poco más adelante, con sus 4 o 5 kilómetros de subida y una pendiente media del 9%.



Una vez hidratados convenientemente nos volvimos a poner en marcha y la cerveza nos debió de sentar bastante bien, porque subimos el puerto en un periquete (he de decir que en el año 2009 aquí me dió un golpe de calor que me hizo abandonar) y casi sin darnos cuenta nos encajamos en la localidad de Alcalá del Valle (kilómetro 49), donde ya empezamos a sentir las primeras molestias en forma de ampollas y tirones musculares que nos darían la murga en la segunda parte de la carrera, y que practicamente nos impidió correr casi hasta la meta.



Como pudimos llegamos a Setenil de las Bodegas (pueblo bonito, bonito, pero es todo cuestas), kilómetro 59, donde pudimos recoger una las mochilas que habíamos dejado en la salida, puesto éste que contaba con avituallamiento sólido y líquido.

De forma rápida nos tomamos un sanwich, una coca cola, nos cambiamos de ropa y volvimos a ponernos en marcha, ya que lo peor que te puede pasar es que te enfríes y luego no seas capaz de arrancar otra vez.




Salimos de Setenil sobre las 8´30 horas de la tarde camino del Cuartel de la Legión (kilómetro 77), donde nos esperaba una comida caliente y la otra mochila, además de un equipo de fisios y podólogos que como pudimos comprobar más tarde no daban abasto.

Por fin, sobre las 12 de la noche llegamos al Cuartel (primero Ramón, después el menda, y posteriormente Fernando quien en las cuestas abajo venía sufriendo por culpa de su maltrecha rodilla), donde nos tomamos un caldito caliente que, por lo menos a mí me supo a gloria.

Como ya he dicho antes tenía una ampolla en el pié izquierdo que me impedía correr y casi andar, por lo que decidí esperar en la cola de los podólogos lo que hiciera falta (al final fue casi 1 hora) porque como tenía el pié no estaba claro que consiguiera acabar. Finalmente los podólogos hicieron bien su trabajo y sobre la 1´30 de la madrugada nos volvimos a poner en marcha para rematar la faena.

Esos últimos 24 kilómetros los cubrimos en unas 5 horas y media (totalmente andando), con la subida a la ermita de Montejaque y Cuesta del Tajo de Ronda por medio, y ¡¡POR FIN!!, a las 6 de la mañana del Domingo, después de 19 horas de lucha y sufrimiento (Ramón lo pasó realmente mal con las ampollas), llegamos a la META con la satisfacción de haber conseguido el objetivo, que no era otro que terminar esta prueba.




Desde aquí quiero felicitar a mis compañeros Fernando y Ramón que consiguieron su primer ladrillo (en Ronda dan ladrillo no medalla), si bien dicen los veteranos que un corredor no es cientounero hasta que no consigue terminar la prueba dos veces.

Recuerdos también para nuestros paisanos de Jardines de Gerena (David y Juan), aunque uno de ellos abandonó en Setenil (mucho ánimo que el año que viene se termina) y el otro lo estuvimos viendo hasta el kilómetro 70, así que no sé si consiguió terminarla o no.



Finalmente saludar desde aquí a todos nuestros amigos Pretorianos, Susmurais, Felipe, Migue, etc, que tan bien nos tratan cada vez que nos vemos.



Un saludo.




RAFAEL.